Bicho
Estudio Valija / Fabricio Caiazza
Rosario 2022/23
El proyecto Bicho se presenta como criaturas de madera que surgen del litoral argentino, como una reimaginación de las formas animales que lo habitan. Inspirado en el juguete «16 Animali» diseñado por Enzo Mari en 1957. Los objetos que conforman Bicho son una reinterpretación local y transformadora de aquella pieza icónica. Su escala y presencia son diferentes, exploran la relación entre el arte y la naturaleza, estableciendo un vínculo entre lo humano y su entorno.
La construcción de Bicho se lleva a cabo en colaboración directa con un maestro carpintero, figura que aporta una dimensión artesanal y única a cada una de las piezas.
Bicho busca ser más que una serie de objetos, se transforma en una voz que escucha y que busca escuchar. En su búsqueda por establecer un vínculo con el entorno socioambiental, este proyecto planea entrevistar a personas que realizan actividades sustentables, que proporcionen una perspectiva amplia y diversa a su desarrollo.
Con la estampación de las imágenes de Bicho en afiches y camisetas, el proyecto amplía su alcance. Abre la posibilidad de intervenir en el espacio público, generando experiencias con las infancias, los humedales y espacios educativos. Una invitación para reflexionar sobre nuestra relación con la naturaleza, sobre cómo la obra de arte puede ser una herramienta para establecer vínculos más profundos y sostenibles con nuestro entorno socioambiental.
En definitiva, Bicho es algo vivo, unas criaturas que invitan a unirse a ellas en un viaje de redescubrimiento y conexión.
proyecto Bicho en instagram
La única en la tierra, Galería Gabelich Contemporáneo, Rosario 2023
Bicho en Festa del Grafisme, Centre Universitari d’Arts i Disseny de Barcelona 2022
Qué placer estampar cerca de 300 camisetas para grandes activistas socioambientales, Complejo Educativo Alberdi, Rosario. 2022
Salón Nacional, Centro Cultural Kirchner
Enzo Mari (Italia 1932 / 2020)
Enzo Mari es un personaje singular en el mundo del diseño. Con su enfoque crítico, logró redefinir la estética y la funcionalidad en un sinfín de proyectos que abarcan desde el mobiliario hasta los juguetes. Pero Mari no se detuvo ahí. Su enfoque también abarcó lo político, explorando cómo el diseño puede ser un arte aplicado y una herramienta para el cambio social.
Mari tenía una curiosidad incansable por la percepción visual y las posibilidades de la producción en serie. En sus creaciones, se pueden encontrar influencias de las ciencias de la naturaleza y las ciencias humanas, creando un maridaje fascinante entre la expresión artística y la función práctica. Para Mari, el diseño no era solo una cuestión de crear objetos bellos, sino que también debía ser funcional, con una atención rigurosa a los materiales y procesos de producción.
Además, Mari fue uno de los pioneros del movimiento Open Design y el DIY (Do it yourself). En una época en la que se buscaba la democratización del consumo, Mari comprendió rápidamente las limitaciones materiales de una industria en expansión y nos advirtió sobre la pesadilla que se avecinaba. Ahora, en un momento en el que debemos repensar nuestra noción de prosperidad y buscar materiales sostenibles, la visión de Mari sigue siendo una fuente de inspiración para todos aquellos que buscan un diseño consciente y transformador.